Técnica de hipnosis
La hipnosis puede ser una forma efectiva de relajar y enfocar la mente. Se puede usar para aliviar el dolor, reducir la ansiedad, mejorar el estado de ánimo y ayudar con la depresión.1 La hipnosis también puede ayudar a las personas a desarrollar nuevas habilidades, relajarse o adoptar nuevas perspectivas.
La hipnosis es una técnica en la que el profesional capacitado recurre a técnicas de relajación guiada, concentración intensa y el enfoque de la atención.
El objetivo es que el paciente logre un estado de conciencia elevado, a veces denominado trance, para concentrar su atención en tareas o pensamientos específicos.
Existen dos tipos de hipnosis:
Terapia de sugestión: se usa para cambiar comportamientos a través de la sugestión.
Análisis del paciente: se usa para explorar un evento o recuerdo a fin de encontrar la raíz del problema
Un concepto equivocado común es que bajo la hipnosis, la persona queda bajo el control del otro. No es así. Un hipnoterapeuta no puede hacer que el paciente haga algo que no quiere hacer.
Beneficios de la hipnosis
En un estado hipnótico, la persona tiene la oportunidad de explorar pensamientos, sentimientos y recuerdos que pueden haber ocultado de su conciencia.
La hipnosis se puede utilizar para:
- Mejorar o regular el dolor
- Fobias y ansiedad
- Miedos
- Apegos emocionales
- Trastornos del sueño
- Depresión
- Estrés
- Duelo y pérdida
- Cambios de percepción para afrontar los conflictos
- Vidas pasadas